Cuento final
Este cuento fue escrito entre Maurizio Donado, Elin Elizabeth Sánchez, Edilberto Pérez, Nando Gutiérrez, Virgilio Platt, y la edición del Comité editorial de Cuento Colectivo. ¿Como te pareció el resultado?
La melodía llego a ella como una nube de ambrosia libidinosa, como miles de diminutas partículas envolventes. Fue despertando del sueño mágico en el que estaba sumergida eones atrás, no recordaba la última vez que estuvo despierta. Los recuerdos fueron llegando lentos, con una carga de pesares y alegrías sumergidas en el más absoluto desgobierno.
Deseó con inmenso fervor que esa voz melodiosa nunca se fuera de sus oídos, deseó tanto aquella voz que sus párpados se abrieron con un sonido mágico que se escuchó en todo el universo. Un abrir de ojos y un nuevo despertar, el nacimiento de la nueva vida. Sonidos que seguía escuchando como si fueran un mensaje de otra dimensión, notas que formaban mensajes de parte de su gran mentor.
En la música había algo, algo que no lograba descifrar, pero sabía que necesitaba comprenderlo. Había una energía muy especial, era música salvadora, y detrás de ella sabía que iba a encontrar un gran milagro. Los días pasaban y la música allí estaba, resonando constantemente.
Sin embargo, después de unos días no pudo aguantar más. Se levantó y comenzó a moverse al ritmo de la melodía. Tras unos minutos de danza, en el momento de más inspiración, imágenes comenzaron a quedar plasmadas en su brazo izquierdo. Fue en ese momento que entendió el antiguo lenguaje de su maestro.
“Has dormido por mucho tiempo y, por fortuna, tu alma ha descansado. Pensé que nunca descifrarías mi mensaje, no obstante, lo has hecho a tiempo. Como siempre, está en tus manos determinar cuál será tu función en el universo por el próximo periodo. Siempre he dicho que tienes dotes celestiales, sin embargo, algo pasa en la última prueba que hace que siempre termines una vez más atrapado en el cuerpo de un simple mortal.
Créeme cuando te digo que las posiciones celestiales del alma son mucho más ventajosas que muchas. Gozarás de más poder. Entre ellos… intervenir en la vida de seres de menor escala, por ejemplo, los mortales. Tienes el potencial de un dios, pero sólo tú puedes lograrlo. En unos días empiezan las competencias, y en esta ocasión están aún más reñidas. Te recomiendo que practiques. Nada asegura que esta vez no quedes siquiera de mortal, tal vez quedes de perro o como un asqueroso guak.
Y comenzaron las prácticas, esta vez, consciente de que la prueba principal, la última y en la que siempre le faltaba algo, era una relacionada con la música, el idioma universal. Sin embargo, algo en ella era diferente esta vez, tenía un sentimiento de calma, una especie de certeza de que esta vez su alma sí ascendería.
El día de las pruebas, triunfó en varias y en otras se tendría que conformar con estar entre los primeros. De todas formas, lo importante era el resultado final. Estas pruebas eran de todo tipo, diseñadas para comprobar la sabiduría del alma, lo aprendido desde su génesis.
La última prueba, la más importante y más bella para observar, teniendo en cuenta que durante la misma las almas más avanzadas sufren una metamorfosis repleta de colores y explosiones celestiales, era la de respuesta a la música. Cuando la música inició, dejó que su alma fluyera con ésta. Sentía un cosquilleo por todo su ser… alas comenzaron a salir de su espalda.
Ahora tenía plumas de todos los colores, todas las demás almas estaban maravilladas, su mentor se regocijaba con el espectáculo. La melodía continuaba y ahora, junto con sus alas, el movimiento era aún más hermoso. Sus ojos comenzaron a cambiar de color, ahora eran de un azul oscuro inhumano, un azul oscuro divino. No cabía duda de que ésta era el alma más ágil.
Unos minutos más continuó la competencia, lo suficiente para transformar su alma en una más evolucionada, de las más bellas jamás vistas; una con poderes ilimitados, con una gran responsabilidad sobre sus hombros. Le sería entregada el poder de la galaxia Oxtigris. Podría usar sus poderes para moldear el presente de la galaxia y eones después, otras pruebas se llevarían a cabo.
El resultado de esas pruebas determina si el alma obtiene más dominio, o si es necesario que descienda a un nivel inferior por no haber cumplido con los estándares. No obstante, por mucho tiempo, el poder de la galaxia sería suyo y en sus manos estaba ahora el destino de esa raza.