Te invitamos a continuar esta historia que apenas comienza. Esta fue propuesta por Nati Albert, una de nuestras usuarias. ¡Participa e invita también a tus amigos!
Todo mi cuerpo temblaba, la sujetaba entre mis manos con la sensación de no poder soportar ni un segundo más, ni un gramo de peso más, creía que con solo un suspiro mi cuerpo se desvanecería…
Una respuesta
Entonces se deslizó entre mis dedos. Nunca olvidaré su expresión, al caer al vacío. Su cara era de miedo cuando todavía la sujetaba con toda mi fuerza, pero se tornó a una de tristeza y resignación, cuando supo que se iba a resbalar. No había nada que la salvara del abismo… la nada…