Cuento en construcción
Sigue este punto de partida propuesto por PrincesaGuerrera, una se nuestras participantes, a partir de la fotografía. Apenas comienza la historia. ¡Participa! El ejercicio sigue abierto de forma indefinida y una vez sepamos el final le inventaremos títulos.
Acabábamos de salir del funeral de Bernardo. Estábamos bastante contentos. Ahora sí podríamos querernos como él lo había deseado. Era un buen tiempo. Estábamos pensando en festejar con comida y buena música, algo entre amigos, lo de siempre. A Bernardo le habría encantado eso, lástima que no pudiera estar presente.
Recordar a Bernardo me hacía pensar en caídas libres y aventuras; quizá por eso su funeral fue tan especial. El funeral había sido como su vida, toda una aventura repleta de cariño; en especial entre Misael y yo…
One Response
Siempre nos decía: “el día de mi muerte no quiero que nadie esté triste. Ese día quiero que me velen con alcohol y que las melodías y tambores de mi caribe se oigan fuerte. Quiero que todos bailen y festejen mi partida. Nada de lágrimas ni rituales deprimentes e incómodos”.
Y así fue. Sin embargo, no puedo negar la falta que me va a hacer su presencia. Él era un ser maravilloso que contagiaba a todos con tu espíritu libre, eccéntrico e irreverente. Es algo irónico que tal vez esas mismas cualidades fueron en parte culpable de su partida…